Millón

Hoy lo empiezo a creer, tiraré de los refranes,
más vale pájaro que pajarraco,
por la hucha sufre atraco
y no hay quien vea más peces que panes.

No estoy por la labor de visitar divanes,
y mi estado no pide un favor flaco;
mi bondad no quiere otro stop cardíaco
entre ritmos de swing sin mis sultanes.

Por más que orangután-es, no deja un céntimo vivo,
no va hecho ni derecho
por más que la ley tuerza su motivo.

Señoría, explique si esto es despecho
y no se irá este martes vivo.
Contad si ya es catorce, y está hecho.

...y el pulpo

Adopten pues a esta fiera
que hoy tan feliz nos hace.
Que venga a comer mejillones.
que se luzca con su certeza.
Nos gustará tal desenlace,
si Iniesta las callacuece;
palidece en la pecera,
que nadie lo lleve a cueza,
para tocar los Webbs (no quiero rimar con-j-ones).
Bendito martes y trece.

La primera

Desde una península no hispánica,
van treinta a decir aloha.
Una dama en tiempos tiránica,
que a la otra no acongoja;
un guerrero de zurda volcánica,
que a nuestro bosque, hoy, no deshoja;
saben que su águila, facha satánica,
se quedará, en la meta y teticoja.
Que el domingo, a la naranja mecánica,
se la merienda la roja.

(Hoy juegan la semifinal del mundial España-Alemania y el domingo la final contra Holanda, -si se cumplen mis expectativas-)

Al inem

Y se va lo que te queda,
y la angustia permanece.
Y no es un stop, sino un ceda,
maldito martes y trece.

Maldita falsa moneda
la que te quita el destino,
el ladrón caza en la veda
en que transita el desatino.

Llegará el momento -y digno-
en que saldrás por la puerta;
no encontrarás otro signo
y parecerás sombra yerta.

No es pasado, es lejanía,
levantando polvareda,
cortarás esta agonía
sobre tu nueva vereda.